Gárgola del día

En medio de la muchedumbre porteña y a plena luz del día, se me clavó la vista en un personaje inolvidable. A medida que me iba acercando, más me impactaba su presencia, su postura inerte, excelsa y fantástica. Era como si nadie me viera, excepto él, que con su penetrante mirada me hizo una reverencia, yo le contesté con un pestañéo tímido. Como andaba sola por esos lados, me quedé contemplando su mitológica especie por unos mints. mientrás se contorcionaba mounstruosamente sobre su eje. Debo reconocerlo, tengo una debilidad con las gárgolas, no me perdía capítulo de la serie animada 'Gargolas' cuando era jovencita, y bueno... sí, me pasan cosas con esa... raza, no sé, es su misterio, su vida noctámbula y solitaria, ese aire medieval docto me hace imaginar que debe saber muchos secretos, y a pesar de su oscuridad se me hace un personaje demasiado noble y protector que logra que fantasee con ser salvada, llevada lejos y envuelta en un mundo distinto en una noche memorable entre catedrales catedrales y música clásica.

Volvamos a ser

Hace 5 minutos me di cuenta que mi diario de vida a estado botado hace unos cuantos años, no es que no tenga qué escribir, pero ahora NO TENGO TIEMPO PARA ESCRIBIR, siempre hay mil cosas que hacer,y ahora hasta me canso de escribir a mano. El tema de la globalización afecta TODO y A TODOS, la gente ya no hace nada sin antes consultar a su PC o a su MAC. La tecnología nos consume y la necesitamos, qué le vamos a hacer. La gente ya no compra discos, los baja de internet, lee libros en la pantalla hasta quedar miope, sacan las tareas del rincón del vago, te dan abrazos y regalos virtuales, los profes mandan todo por correo y otros lo suben a un blog o a twitter para tenernos esclavizados aun más a la red. Los pololos se conforman con pololear por web cam, los amigos se mantienen vía posteo en facebook, para el cumpleaños ya no te van a ver, te escriben un post en facebook y los carretes de casa giran en torno a youtube. Qué le vamos a hacer, así está la vida. 

"La gente no entiende que el dominio peculiar es una risa teatral."

Volvamos al teatro, a las emociones desbordantes. Volvamos a las cartas de puño y letra, a telefonear y visitar a los amigos, a andar en bici y pasar los fines de semanas a pata pelada en un parque. Dejemos un día para charlar por horas con alguien especial, fumando, riendo o escuchando un buen vinilo de Jimy Hendrix. Volvamos a llenarnos de ilusiones y creer en la otra persona. Volvamos a una vida más humana.